El fin del SaaS
El CEO de Klarna declara que van a sustituir Salesforce y Workday por soluciones propias desarrolladas con IA. ¿Es el fin del Software as a Service? Costes de oportunidad y fatiga SaaS.
Esta semana, Seeking Alpha se hacía eco de unas declaraciones del CEO de Klarna, según las cuales afirmaba que pensaban reemplazar dos de sus proveedores Software as a Service (SaaS) más críticos, Salesforce y Workday, por soluciones propias desarrolladas internamente.
Klarna's (KLAR) CEO Sebastian Siemiatkowski said that the company is shutting down its software as a service provider (SaaS) Salesforce (NYSE:CRM) and within a few weeks will shut down Workday (NASDAQ:WDAY).
There are large ongoing internal initiatives that are a combination of AI, standardization, and simplification. As an example, we just shut down Salesforce. Within a few weeks, we will shut down Workday. We are shutting down a lot of our SaaS providers, as we are able to consolidate," said Siemiatkowski on a conference call.
Siemiatkowski added that with the help of AI, the company is able to standardize and create a more lightweight tech stack to operate more effectively with higher quality.
Conociendo como conozco el sector tecnológico, me puedo imaginar la reacción a la noticia. Miles de CEOs enloquecidos proyectando como hacer lo mismo en sus empresas. ¿Es el principio del fin del modelo SaaS?
La fatiga SaaS
Las palabras del CEO de Klarna ponen negro sobre blanco algo que es evidente en la industria: hay mucha fatiga con el estado actual del SaaS y, especialmente, con sus costes.
La estrategia de los SaaS por su lado está clara. Entrar en tu empresa, apoderarse de flujos clave del negocio y/o operaciones y, una vez asentados, expandir haciendo venta cruzada de funcionalidades relacionadas. Y cuantos más servicios atesoren, más altas son sus barreras de salida, y más poder de negociación tienen para defender, e incluso aumentar, sus precios.
Es por esto que las declaraciones de Siemiatkowski han resonado tanto. Salesforce y Workday son dos de los proveedores SaaS más pegajosos que existen. Si Klarna es capaz de deshacerse de ellos, ¿qué futuro espera a la mayoría de SaaS ahí fuera que apenas tienen ninguna barrera de salida?
El coste de oportunidad
Hay quien duda de que Klarna pueda realmente reemplazar Salesforce y Workday por soluciones propias y lo enmarca dentro de la necesidad de hacer ruido alrededor de la IA ante una posible salida a bolsa de la empresa.
Estratégicamente encuentro razones para posicionarme en ese grupo, principalmente por uno de los costes habitualmente más ignorado del panorama empresarial: el coste de oportunidad.
Hay muchas malas razones para contratar un SaaS, pero una de las buenas es que te permite enfocar tus recursos en aquello que te hace diferencial frente a la competencia. Cuando el CEO de Klarna declara que va a invertir sus recursos en deshacerse de estos sistemas, está también reconociendo indirectamente que no ve mejores oportunidades en los que enfocar su esfuerzo.
Ahora bien, un contraargumento podría ser que precisamente mejorar sus márgenes reduciendo costes es diferencial sobre la competencia. A largo plazo, cuando una industria pasa su fase expansiva, aquellos más eficientes suelen ser los que se llevan el mercado. Si Klarna es capaz de operar con un margen bruto del 90%, tendrá una ventaja notable sobre competidores que sólo sean capaces de hacerlo con uno del 80%.
En definitiva, es difícil adivinar la situación de Klarna porque nos falta contexto, pero es vital que introduzcamos el coste de oportunidad en nuestras decisiones. Cada vez que escogemos una opción estamos renunciando a todo lo que podríamos hacer en su lugar, y cada empresa, en cada momento, tiene que escoger unas oportunidades sobre otras dependiendo de su situación y contexto, y no fruto del último titular de moda.
¿Es viable construir tu propio SaaS?
Otro aspecto importante, más allá de evaluar el coste de oportunidad, es evaluar la viabilidad de tal cambio. Leo al CEO de Klarna decir que va a aprovechar la IA para desacoplarse de Salesforce y Workday y, aún asumiendo que la IA fuera capaz de programar estos sistemas complejos de forma eficiente (que no lo hace a día de hoy), todavía quedaría un gigantesco problema: entender el dominio del problema que se quiere resolver.
Sí. En teoría, Klarna sería su propio cliente y debería conocer sus necesidades. Sin embargo, esto no garantiza en absoluto que puedan crear un producto de forma exitosa. Los numerosos proyectos internos fallidos en múltiples empresas son buena prueba de ello.
El coste de oportunidad, por tanto, va más allá de los equipos de producto implicados. Debemos incluir también el coste de todos los interesados que deben participar en el proceso. Esto abarca la definición de requisitos, las pruebas y la validación del sistema, entre otras tareas.
El secuestro SaaS
Recapitulando. Reemplazar un SaaS no es sencillo. Para empezar, tenemos que valorar el coste de oportunidad de hacerlo, tener recursos disponibles, y además, con las capacidades necesarias para hacerlo.
En cierto modo podría decirse que muchas empresas están secuestradas por sus proveedores SaaS. Muchas querrían abandonarlos, o al menos reducir gastos, pero no pueden. Para más ofensa, esto lo aprovechan bien sus proveedores para extraer el máximo valor beneficio posible de esta relación.
Construir soluciones propias no es una alternativa viable para la mayoría de las empresas. Sí creo en cambio que la fatiga SaaS y las posibilidades que nos brinda la IA, va a traer cambios. Cambios liderados por empresas de nueva creación, desarrollando soluciones a medida con equipos muy pequeños, quizás utilizando otros modelos de negocio como el pago único, o el pago por versiones.
Los fundadores de Basecamp, y pioneros del SaaS, Jason Fried y David Heinemeier Hansson, han sido de los primeros en posicionarse en esta vuelta a cobrar una única vez. Han bautizado a su movimiento, “Once”, y su manifiesto reza así:
Something happened to business software.
You used to pay for it once, install it, and run it. Whether on someone’s computer, or a server for everyone, it felt like you owned it. And you did.
Today, most software is a service. Not owned, but rented. Buying it enters you into a perpetual landlord–tenant agreement. Every month you pay for essentially the same thing you had last month. And if you stop paying, the software stops working. Boom, you’re evicted.
For nearly two decades, the SaaS model benefitted landlords handsomely. With routine prayers — and payers — to the Church of Recurring Revenue, valuations shot to the moon on the backs of businesses subscribed at luxury prices for commodity services they had little control over.
Add up your SaaS subscriptions last year. You should own that shit by now.
SaaS still makes sense for many products, but its grip will slip. Installation and administration used to be hopelessly complicated, but self–hosting tech is simpler now and vastly improved. Plus, IT departments are hungry to run their own IT again, tired of being subservient to Big Tech’s reign clouds.
Once upon a time you owned what you paid for, you controlled what you depended on, and your privacy and security were your own business. We think it’s that time again.
Introducing ONCE, a new line of software products from 37signals.
Pay one time, own forever.
We write the code, you get to see it.
We give you the software, you get to host it.
Simple and straightforward, not enterprisey and bloated.
For one fixed price. Once.
So far there are two ONCE products:
Campfire: A group chat system similar to Slack or Teams, but simpler.
Writebook: The easiest way on earth to publish a book online.
In the early 2000s, we were among the early pioneers leading the industry into the SaaS revolution. Now, 20 years later, we intend to help lead the way out. The post–SaaS era is just around the corner.
Stay tuned.
Personalmente creo que es un movimiento acertado. Muchos productos de software no justifican un pago a perpetuidad por asiento y se adaptarían mucho mejor a un pago único. La IA, bajando el coste de desarrollo, puede hacer que este modelo vuelva a ser posible.
Si esta previsión se cumple, el fin del SaaS tal como lo conocemos puede ser una realidad. Sólo los proveedores que realmente necesiten contar con información actualizada constantemente o de una infraestructura y operativa compleja, justificarán una suscripción.
En contraposición, todos aquellos SaaS que no son más que sistemas de formularios que simplemente actúan como repositorios de datos, serán reemplazados o comoditizados. Bien porque surgirán soluciones de pago único, bien porque la IA aumentará la competencia en sus nichos hasta el punto de estrechar los márgenes hasta que nadie gane dinero.
Un tema muy interesante que hemos estado explorando como la AI afecta el buy vs build.
Hay una dimensión que también considero que es como la eficiencia permite mayor innovación con menos gente.
Si me encuentro que el trabajo de 100 personas ahora lo puedo hacer con 80, ¿Qué hacemos con las 20 personas restantes?
Ahí es donde creo que estás iniciativas surgen, traerse procesos externalizados internamente porqué:
- Tengo que pagar estos salarios
- Puedo reducir costes externos
- Solución a medida
La AI va mejor en dominios conocidos/commodity, por lo que invertir aquí es más seguro que en otros dominios.
Lo que no sabemos aún será el coste de mantenimiento de esto. Y ahí creo que estamos subestimado el problema. Crear lo conocido se ha vuelto más barato. No estoy seguro que su mantenimiento también.
Me cuesta ver el final del SaaS, o al menos en este momento. Primero, porque todavía hay un mercado enorme por penetrar que todavía está en aras de digitalización.
Por otro lado, por lo que mencionas, el coste de oportunidad. Este coste, ya de por sí difícil de calcular, se vuelve un ejercicio titánico si hay que añadir contrataciones, procesos, reasignaciones y mantenimiento. Además son productos que sin continuidad y un equipo enfocado al discovery interno (con las complicaciones que tiene en un entorno interno) no serán capaces de adaptarse a los cambios y necesidades de los usuarios.