Tres fases y actitudes necesarias en el desarrollo de un producto
De cuando el padre del Agile reconoció que el desarrollo en cascada podía funcionar. Dos nuevos modelos mentales: 3X (Explore, Expand, Extract) de Beck, y Pioneers, Settlers, Town-Planners de Wardley.
Kent Beck y el modelo 3X: Explore, Expand, Extract
Corre el año 2016 cuando Kent Beck, una leyenda de la programación por haber sido padre del movimiento Extreme Programming y del Agile Manifesto, publica un artículo de esos que cambian paradigmas: The Product Development Triathlon.
Beck comienza el artículo con este primer párrafo:
25 March 2016. Because I keep careful notes these days I can identify the precise moment when I asked the question I should have asked twenty years ago: what if those waterfall folks aren’t wrong, what if they are solving a different problem than I’m solving? What problem is that?
El padre de Extreme Programming, el padre del Agile Manifiesto, diciendo que a lo mejor el desarrollo en cascada sí tiene sentido cuando lo aplicas a un problema concreto. Pero, ¿qué está pasando?
Esta epifanía no le llega por casualidad. En esa época, Beck se encuentra trabajando para Facebook. Y allí descubre equipos que tienen éxito en sus proyectos siguiendo las metodologías más diversas, incluido el Waterfall clásico.
Se plantea entonces la pregunta. ¿Y si no hay un modelo (Agile, Waterfall…) que funcione para todas las fases del desarrollo de un producto? ¿Y si en cada fase se comportan mejor unos modelos que otros?
A partir de ahí Beck introduce en el artículo una curva S, y pasa a describir tres fases por las que atraviesa cada producto durante su evolución: Exploración, Expansión y Extracción.
Según sus propias palabras:
Product development proceeds in three phases:
1. Explore–the risky search for a viable return on a viable investment. Successful exploration is unpredictable, so the highest expected value strategy is to reduce the cost of experimentation and put a little investment into many, uncorrelated experiments. If you’re lucky, one of these experiments turns out to be unexpectedly successful, which leads to:
2. Expand–now things are going nuts (think Pokemon Go or Facebook Live Video). Unanticipated bottlenecks appear. All you have time for is to eliminate the next bottleneck just before it derails you. Once growth becomes routine, it’s time to:
3. Extract–now the shape of the problem and solution spaces are clear. One euro in equals three euros out. Playbooks emerge: here’s how you roll out the service in a new city. Economies of scale matter: delivering the service at lower cost is more profitable.
Para Beck, cada una de estas fases presenta problemas distintos y, por lo tanto, requieren de aproximaciones particulares. No podemos esperar operar igual cuando afrontamos la fase de exploración que cuando nos encontramos en fase extractiva.
Si asumimos que este postulado, el Waterfall clásico tan denostado por los proponentes del Agile Manifesto resulta que sí puede funcionar. Pero funciona en una fase muy concreta, la fase de Extracción, en la cual has eliminado toda la incertidumbre y tu futuro es predecible. Esta fase se caracteriza porque 1+1 es igual a 2, lo que te permite estimar correctamente y trazar planes con un grado de confianza alto.
Por contraposición, en la fase Exploración, donde viven la mayor parte de las Startups, 1+1 puede ser igual a 0. Ó a 17. Ó a cualquier otro número. En esta fase la incertidumbre es máxima, y tu único objetivo es optimizar el número de experimentos para encontrar esas palancas de crecimiento que te permitan llegar a la siguiente. La mayor parte de los experimentos fracasarán (1+1=0), pero los que verdaderamente tienen éxito pueden resultar exponenciales (1+1 =17).
En otras palabras, no hay modelos buenos o malos. Un modelo será más o menos acertado según la fase en la que se encuentre nuestro producto. Y esto es importante porque también afecta a los perfiles, a las personas, que destacarán (o sufrirán) en cada fase.
Pioneers, Settlers y Town-Planners
Llegamos así a Simon Wardley, actualmente investigador en el campo de la tecnología, pero quién en el pasado había vivido la experiencia de gestionar equipos de desarrollo. En 2015, Wardley escribía un post en su blog personal en el que planteaba que no sólo la aptitud, si no también la actitud, es clave a la hora de formar un equipo.
Wardley plantea tres tipos de perfiles de acuerdo a sus actitudes: Pioneros, Colonos y Urbanistas.
Los Pioneros son aquellos perfiles que se manejan mejor en la incertidumbre. Son aventureros que no tienen miedo a introducirse en terreno desconocido. Disfrutan explorando y abriendo camino, y son capaces de cambiar rápidamente de rumbo aunque ello suponga desandar el camino andado.
Los Colonos lo forman aquellos perfiles que recogen aquellos caminos que los pioneros han abierto con éxito y los mejoran, los expanden y los hacen útiles para ser transitados (o comercializados).
Los Urbanistas por su parte recogen lo que los colonos han mejorado y el mercado ha validado, y lo industrializan. Su especialidad es optimizar costes aprovechando economías de escala. En su mundo no hay incertidumbre, cada euro ganado de margen es un euro más a beneficio. Su forma de pensar es estructurada y a largo plazo.
Uniendo 3X y PST para mejorar la productividad de tus equipos
Hemos visto dos modelos mentales, el 3x de Beck y el PST de Wardley. Es fácil observar cómo las fases de uno y los perfiles de otro se solapan casi a la perfección.
Las consecuencias de esto no son menores, y es que, dependiendo de la fase en la que tu empresa o producto se encuentre, unos perfiles u otros se adecuarán mejor que otros. Del mismo modo, debemos prestar especial atención a los cambios de fase, pues los perfiles y modelos que te sirvieron en una probablemente no se adapten bien a la siguiente.
Por ejemplo, si tu empresa está en fase de Exploración, necesitarás perfiles de tipo Pionero que se sientan cómodos con la incertidumbre y puedan soportar el caos, o incluso destacar en él. Sin embargo, esos mismos Pioneros llegados a la fase de Extracción, se encontrarán perdidos y desubicados, tratando de aplicar su exitoso playbook de exploradores a una situación dónde, en realidad, se requiere otras capacidades que no poseen.
Del mismo modo, si tratas de explorar con perfiles de tipo Urbanistas, los harás terriblemente infelices. Sus modelos mentales no están preparados para abrir nuevos caminos, necesitan certezas en las que apoyarse y sobre las que trazar planes sólidos. Y como su tendencia natural es esta, si no identificas el problema, terminarás construyendo de más para hacer cualquier experimento, lo que en la fase inicial de cualquier producto puede matarte.
Acabo de introducir un concepto importante, el de felicidad. No es ninguna sorpresa que la felicidad de tus empleados es clave para la productividad, y ésta va intimamente asociada a que cada perfil se encuentre en el lugar adecuado.
Si Pioneros tienen que ejercer de Urbanistas, o Urbanistas hacer el trabajo de los Pioneros, la infelicidad crece y la productividad y la motivación se resienten, por no hablar de los costes derivados en rotación de personal, etc.
Utiliza la curva 3x como herramienta de alineamiento
No todo está perdido. Afortunadamente los seres humanos somos lo bastante inteligentes para adaptarnos a distintos contextos, pero para eso es imprescindible entender el punto en el que estamos y cómo éste afecta a lo que se espera de nosotros.
Por ejemplo, como buen ingeniero, cuando salí de la carrera mi perfil era claramente el de un Town-Planner, con escasa adaptabilidad y al que la incertidumbre le inquietaba. Sin embargo, con el paso de los años y habiendo pasado por distintas y variadas experiencias profesionales, he aprendido a abrazarla como parte de mi día a día.
Es esa experiencia personal la que intento transmitir a mis equipos en la actualidad, explicando con claridad la fase en la que nos encontramos, y lo que se espera de nosotros en cada momento. Lo hago por interés propio, porque necesito tener el equipo motivado, y eso es imposible de conseguir si cada uno pensamos que estamos jugando a un juego distinto al del resto.
Para este propósito la curva 3X de Kent Beck es una herramienta ideal. Un buen ejercicio de equipo consistiría en explicar las distintas fases, pintar la curva en una pizarra, y que cada miembro indique dónde cree que se encuentra el producto a lo largo de la misma.
Cuánto más coincidáis, más alineamiento tendréis y más fácil será lograr vuestros objetivos como equipo. Si os encontráis en extremos opuestos, necesitaréis indagar más y entender por qué pensáis diferente hasta llegar a la raíz de la discrepancia y solucionarlo.
El mismo ejercicio se puede hacer a nivel compañía. Y es que el desalineamiento no se da sólo entre equipos, si no también entre departamentos. Creedme, no hay nada más triste que ver a dos departamentos tirando de la compañía en direcciones opuestas creyendo ambos que están haciendo lo correcto.
Una empresa puede tener productos en varias fases
Un apunte importante es que, si bien generalmente una empresa está en una única fase en un momento concreto, los productos dentro de ésta pueden estar en fases distintas. Un buen ejemplo es Facebook, a quién como empresa probablemente podríamos posicionar en la fase extractiva, pero la cual tiene productos en diferentes estados de madurez.
Y esto es relevante, porque significa que todos los perfiles tienen hueco. Si un empleado tiene un perfil claramente Pionero, llévalo a un equipo de primera línea dónde esté todo por descubrir. Si por el contrario tiene un perfil Urbanista, muévelo a aquellos equipos que trabajen más a largo plazo y necesiten de un pensamiento más estructurado. Ambos serán más felices, pero sobre todo, también más productivos.
Conclusiones
No todo es binario. El desarrollo ágil puede coexistir con el desarrollo en cascada. No hay modelos mejores y peores, simplemente hay problemas distintos que resolver. Si Kent Beck puede reconocerlo, nosotros también.
Distintas fases en el desarrollo del producto requieren de perfiles y actitudes distintas. No te lleves de exploración a un Urbanista, no intentes construir un proyecto a largo plazo con Pioneros.
Presta atención a los cambios de fase. Los Pioneros que abrieron los primeros caminos pueden no ser los mejores para mantenerlos y optimizarlos.
Utiliza la curva 3X para alinear a tu equipo con la fase y actitudes necesarias en cada momento. Si es necesario, hazlo a nivel empresa también.
Dentro de una misma empresa pueden coexistir distintos productos en distintas fases. Aprovéchalo para mover a los perfiles que se sientan más cómodos en una fase concreta.